Este era un puerco espín llamado pikitos, vivia en un desierto muy hermoso, lleno de arena dorada brillante como oro molido, hacia mucho calor eso si, pero nada hacia que pikitos dejara de ser feliz. Tenia muchos amigos, aunque no hay muchos animales en los desiertos todos los que había eran sus amigos, pues nunca dejaba de apoyarlos, quererlos y cuidarlos. Un día encontró entre la arena una lámpara como la de Aladino, la froto un poco, aunque le dejo unos rayoncitos por sus espinas, salió un mago flotador y le dijo que tenia que pedir 3 deseos por haberlo liberado, pikitos lo pensó por unos minutos y le dijo: bueno mago la verdad yo soy muy feliz viviendo aquí con mis amigos en este maravilloso desierto, pero muchas veces en mi noche nocturna donde me encuentro solo y a la deriva pienso mucho en mi familia, hasta el momento no conozco a otro como yo, entonces mi primer deseo será tener una familia de mi especie. Muy bien, concedido ¡! Bueno mi segundo deseo es tener una gran piscina para meternos todos a nadar en los días calurosos. Concedido! Y mi tercer deseo es que todos vivamos felices por mucho mucho tiempo.